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La importancia de calentar y estirar antes de esquiar
Estirar antes de esquiar es tan importante como calzarte los esquís para esquiar. Llega el momento que tanto has estado esperando. Llega el momento de pisar la nieve y tienes tantas ganas de deslizarte por las pistas que no piensas en estirar tus músculos. Este es un gran error. La gran mayoría de accidentes y lesiones que se producen en la nieve es por falta de un calentamiento previo.
¿Cuáles son las zonas de tu cuerpo que debes trabajar y estirar antes de esquiar?
Articulaciones
Las articulaciones que más sufren son las de las piernas. Las primeras que debemos trabajar son las de los tobillos, rodillas y caderas. Para ejercitarlas puedes hacer movimientos circulares hacia la derecha y hacia la izquierda. Todo, con la punta del pie en el suelo. Para trabajar las rodillas, te recomendamos que hagas flexiones durante unos segundos. Y respecto a las caderas, también, moverlas de forma circular.
¡No podemos olvidar la parte de las cervicales! También es aconsejable ejercitar y calentar con repeticiones de movimientos las cervicales y el cuello.
Piernas
La parte más importante son los glúteos, los cuádriceps y los isquiotibiales. Para trabajar esta zona, en primer lugar, cruzamos los brazos y con la espalda recta nos agachamos, doblando las rodillas.
Abductores
Para estirar antes de esquiar también debemos flexionar los abductores. Para hacerlo nos colocamos de pie, con las piernas separadas a la altura de los hombros y con las manos en la cintura. En esta posición, hacemos una zancada lateral mientras flexionamos la pierna.
Estas son las principales zonas del cuerpo que hay que estirar antes de esquiar. ¡Pero el ejercicio no termina aquí! También debemos ejercitar nuestro cuerpo al volver de esquiar.
Estos son los ejercicios de estiramientos recomendados para después del esquí.
Estirar antes de esquiar es tan esencial como preparar el equipo de esquí para ir a la nieve
¿Qué conseguimos calentando y estirando antes de esquiar? Calentando y estirando el cuerpo consigues que tu sistema cardiocirculatorio, respiratorio, muscular y nervioso comiencen a trabajar de manera progresiva. Haciendo estos ejercicios de estiramiento, tu corazón aumenta de pulsaciones y favorece la circulación. Así, la sangre circula mejor y los tendones y los ligamentos van aumentando de temperatura. De este modo se evitan las lesiones. Y, por lo que respecta al sistema nervioso, el calentamiento ayuda a mejorar la capacidad de concentración.
En definitiva, haciendo los ejercicios contados anteriormente en repeticiones de 8 o 12 segundos por movimiento, podemos preparar nuestras extremidades para hacer deporte.
De la misma manera que calentamos para correr o nadar, para esquiar o practicar snow también se debe hacer. Deslizarte por las pistas de esquí no deja de ser un deporte.